Devotos sevillanos visitan Cantalpino para conocer el lugar donde nació la Beata Eusebia Palomino.
Las familias San Garrido y Montero Garrido, procedentes de Sevilla han visitado hoy nuestro pueblo como acción de gracias.
Todo empezó cuando uno de los miembros de la familia enfermó de leucemia; rápidamente uno de los familiares, gran devoto de la Beata Eusebia Palomino y fiel seguidor de la futura Santa, “acude cada primeros de mes a hacer una visita a la capilla de Valverde del Camino” declaraba su esposa; encomendó la enfermedad de su sobrina a nuestra paisana, prometiendo a cambio, que si salía del trance que suponía la enfermedad, toda la familia viajaría a Cantalpino, su villa natal y conocer así su humilde hogar. “Parece mentira, con los tiempos que corremos ahora la gran pobreza y humildad en la que vivía Sor Eusebia” declaraba una de las visitantes más longevas de la familia.
Y es que hasta Cantalpino han venido cuatro generaciones de esta familia a dar las gracias a la Beata Eusebia Palomino, una vez superada esa dura enfermedad. Han visitado la casa y plazuela donde jugaba Sor Eusebia, han recorrido sus calles y hemos podido charlar con ellos durante su visita a la Iglesia parroquial la cual han catalogado de “grandiosa y hermosa” y han querido aportar su granito de arena haciendo un donativo para las obras de restauración del tejado. Mil gracias familia.
Después de dedicar la mañana a Cantalpino, querían aprovechar su estancia en Salamanca para intentar visitar la “Habitación museo” que ocupo Sor Eusebia durante su estancia en el colegio salesiano y conocer otros lugares emblemáticos de la ciudad como la Catedral.
Muchas gracias familia por dedicarnos un poquito de vuestro tiempo y esperamos que tengáis un buen viaje de regreso a vuestra tierra. Seguro que la Beata Eusebia Palomino os acompaña en el camino.